domingo, 11 de diciembre de 2011

martes, 13 de septiembre de 2011

Lavadero público



Foto hecha en Planes (Alicante), este verano.

lunes, 8 de agosto de 2011

Botijo


El mejor invento, a día de hoy, para refrescar el agua

Llave maestra



Un rincón del alfar de mis amigos Paco y Juan Pablo

Horno árabe


Aquí tenemos a mis amigos Paco y su hijo Juan Pablo llenando el horno árabe para empezar con la cocción de obras en barro.

sábado, 30 de julio de 2011

TIR I ARROSSEGAMENT (Tiro y arrastre)

El origen de estos deportes hípicos valencianos parece ser de los años cuarenta, cuando un tratante de bestias, Ramón Tamarit, venía a vender sus animales a la feria de animales que se celebraba en Valencia dentro del antiguo cauce del río Turia, entre el puente de Serranos y el de la Trinidad.

El vendedor, delante de un comprador interesado, para enseñarle la valía del animal en faenas agrícolas y de transporte, acostumbraba a engancharlo a un carro con una gran carga y hacerlo evolucionar por donde había más dificultades, cerca del río, que era zona arenosa.

Más adelante, estas exhibiciones se convirtieron en deporte, utilizado por los carreteros y labradores para resolver disputas y desafíos, imponiéndose la pista de arena como lugar de competición y estandarizándose unas reglas básicas.

Se utilizan los caballos de campo o percherones, grandes, fuertes y robustos, que arrastran trabajando grandes pesos, y que están familiarizados con el esfuerzo.

Puede ser de uno o dos caballos por carro, uno a barras y otro a reata. La competición empieza con la pesada de las caballerizas, dónde según el peso, se le asigna una categoría u otra, y además, se calcula la cantidad de carga que cada animal llevará. Como norma general, cada caballo llevará el doble de carga de su peso en kilos.

Sobre una pista de arena, caballo, carro y dueño, tienen que pasar desde un extremo al otro. Tienen cinco minutos para atravesar 60 metros. Sólo tiene que hacer tres paradas a lo largo de la pista y llegar al final, cronometrando el tiempo empleado. El carro va lleno de sacos de arena, lo que hace que hunda las ruedas sobre el camino y que el esfuerzo de caballo y amo sea espectacular.

Mientras se realiza el enganche no se puede pegar al animal. Una vez dentro de la pista, se puede hacer tres veces levemente como aliciente, sin dañarlo jamás. Si se pega más será descalificado. Su dueño, al oído, les grita con fuerza para infundirles un ánimo.

Si pasados 5 minutos un caballo no llega a la señal, será descalificado, señalándose el lugar hasta donde llegó por si ningún otro caballo llegara al final, siendo el ganador el que más lejos tirara.